Propagandistas venezolanos insisten en “haber descubierto un fake news” respecto a la denuncia de un habitante de Las Tejerías que luego se retractó. El caso es usado para justificar el monopolio de la información por parte del Estado
Medios de comunicación nacionales e internacionales, así como influyentes tuiteros asociados al Régimen de Nicolás Maduro, han inundado la tuitósfera venezolana con afirmaciones como “se cae la campaña de la derecha”, “descubierto el fake news”, luego de que Isaac Castillo, habitante de Las Tejerías, —que había denunciado un supuesto cobro de dólares, por parte de militares, para dejar pasar la ayuda— apareciera en nuevos videos retractándose de sus declaraciones y hablando a favor del gobierno.
Esta situación es un ejemplo de las estrategias de control de la información por parte del régimen venezolano y promoción de la censura —bajo la excusa del combate a los “fake news”— para monopolizar la información sobre la tragedia y posicionar sólo una versión de los hechos.
El pasado 11 de octubre, periodistas y medios privados de Venezuela, hicieron eco de la denuncia de Isaac Castillo, un habitante de Las Tejerías afectado por el deslave de la noche anterior, quién señaló que “Los líderes de la comunidad, del PSUV, jefes de calle, están prohibiendo que nosotros —los afectados de la tragedia— bajemos a protestar para que nos hagan llegar las ayudas humanitarias. Están cobrando, los guardias nacionales, dólares a los que nos traen ayuda para dejarlos pasar”.
La denuncia fue documentada en video y difundida en las redes sociales y numerosos portales de noticias independientes. Allí, Castillo también resaltó que “en Tejerías hubo una tragedia gracias al gobierno, por no reparar el dique de arriba del ojo del agua y ya basta que estén tapando el sol con un dedo (sic)”.
En un segundo video, que se viralizó el 12 de octubre, Castillo reiteró que la tragedia fue producto de la falta de mantenimiento de un supuesto “dique” y —aunque reconoció que la ayuda empezó a llegar a su sector— sostuvo la denuncia de que mucha ayuda estaba siendo represada por las autoridades en la parte baja del poblado.
Posteriormente, representantes del gobierno se comunicaron con el denunciante y lo llevaron en un recorrido por los trabajos que están haciendo las autoridades. De este recorrido, hay dos registros: uno con el ministro de Atención de las Aguas, Rodolfo Marco Torres, y otro con la vicepresidenta del Régimen, Delcy Rodríguez.
En el primer video, el ministro de Atención de aguas, le explica a Castillo cómo será la reactivación del suministro de agua potable a la población de Las Tejerías luego de la recuperación de 8 pozos de los 19 de tejerías. Mientras que en el segundo video, la vicepresidente le explica el mecanismo para hacer llegar las ayudas a los afectados, al tiempo que Castillo parece identificarse como “un guerrero, un soldado de la Patria, que ha defendido a esta comunidad”.
El anterior video fue editado con fines propagandísticos. El material sin editar no es de dominio público, por lo que no se puede conocer en qué contexto se dijeron las palabras señaladas.
A partir de allí, el aparato de propaganda del Régimen de Maduro ha tomado a Castillo como vocero para amplificar la narrativa oficial de la tragedia, utilizando diversos videos donde cada vez se le aprecia más agradecido y comprometido con el Gobierno.
En otro video Castillo explica que él no entendía el procedimiento para hacer llegar las ayudas y por eso hizo sus primeras declaraciones. Y dice que las ayudas han estado llegando “de una manera impresionante”. En este video, también se ve a la periodista de Telesur hacer preguntas orientadas a promover la efectividad de los procesos de ayuda.
En otro video también se le ve rodeado de autoridades militares y el Alcalde, y allí reconoce que sus declaraciones fueron en medio de la desesperación de la tragedia y acusa a los medios “me agarró en el momento más árdido de la tragedia: sábado, la tragedia; domingo en la mañana, me hacen una entrevista, me redirigen la palabra”.
En el video de la denuncia original no hay constancia de cortes de edición que pretendan esconder alguna intervención o coacción de parte de la persona que grabó para dejar constancia. De hecho, la intervención de Castillo podría considerarse un monólogo en el que desahogó la desesperación del momento.
A pesar de Castillo haberse retractado de su declaración original, no se puede considerar esta información como falsa, tendenciosa o fake news porque respondía a la necesidad de, en palabras del mismo Castillo “que el mundo sepa lo que está pasando en Tejerías”. Este hecho, tampoco permite descartar las otras denuncias acerca de la situación en la zona del deslave como: el cobro de altas sumas de dinero para devolver cuerpos que aparecieron en Miranda, las restricciones de acceso a los medios independientes o a voluntarios y donaciones.
Lo que dijo Castillo no fue un “fake”, sino una declaración que posteriormente, fue matizada, completada o aclarada. Castillo fue la fuente original y los medios cumplieron con la labor de difundir una DENUNCIA.
Un arma contra la prensa independiente
Al igual que ha ocurrido en el pasado, el Estado usó la excusa de la “lucha contra los fake news” para justificar la narrativa única que necesita impulsar sobre lo ocurrido en Las Tejerías y, al mismo tiempo, como arma arrojadiza en contra de la prensa independiente.
De esta forma, el estado ignora y desestima la verdadera importancia de la presencia de la prensa independiente en el sitio: contraste de información, monitoreo de la gestión del desastre, pluralidad informativa. Sin la presencia de la prensa in situ, sería imposible la contraloría sobre la gestión de las autoridades.
Los medios que difundieron su declaración inicial no “fabricaron” la información; simplemente sirvieron de altavoces de lo que parecía una denuncia concreta, realizada por una persona concreta. La declaración inicial de Castillo es importante, porque —indistintamente de haberse ajustado a la realidad o no— generó debate público sobre la cobertura de los medios en la zona y eso no hubiese ocurrido sin esa declaración.
Si lo que dijo Castillo fue información errónea, que luego tuvo que aclarar, o una denuncia legítima que debió matizar debido a la coacción de las autoridades, la responsabilidad no es de los medios que publicaron su denuncia y que solo estaban cumpliendo su trabajo.
