Una investigación conjunta entre Transparencia Venezuela, Es Paja, Probox y Cazadores de Fake News describe los métodos rusos de control de la información que el Gobierno ha usado como “inspiración” para aplicar en Venezuela
La alianza entre Rusia y Venezuela trasciende los campos militar y petroleros y se fortalece en un área que beneficia a ambos gobiernos: la propaganda. Un nuevo informe disponible en inglés y español en el sitio web de Transparencia Venezuela, describe las redes de apoyo conjunto en el área de comunicaciones afines a los gobiernos de izquierda que se han tejido usando la infraestructura comunicacional de Venezuela y Rusia.
Desde el intercambio entre Telesur y RT cómo los discursos de ambas agencias se nutren mutuamente de contenidos benevolentes al gobierno que representan, hasta cómo los medios del sistema público de Venezuela se han convertido en amplificadores de los contenidos de ambas y proveedores de insumos que alimenten las narrativas locales favorables al régimen, todo parte de una estrategia conjunta en la que la prioridad es reforzar los puntos de vista de Rusia y Venezuela.
Además, el acceso a internet y a las redes sociales es otra área en la que el Gobierno de Venezuela se ha apoyado en el modelo de censura ruso, a través de mecanismos de control y/o contaminación de la información en línea, para influir y alterar de forma inorgánica la conversación.
Algunas de las estrategias aplicadas por el gobierno venezolano y descritas en este informe conjunto entre Transparencia Venezuela, Es Paja, Probox y Cazadores de Fake News, son:
- Reducir la inversión en mejoras y mantenimiento de las plataformas que prestan servicio de Internet.
- Censurar “parcialmente” Internet, lo que se aplica a páginas web de medios independientes u organizaciones en defensa de los Derechos Humanos.
- Desarrollar operaciones de influencia y desinformación en redes sociales.
- Crear nuevas leyes para dar carácter a las opiniones emitidas a través de las redes sociales, usando criterios como “traición a la patria” o “terrorismo”.
- Utilizar la propaganda como única “información oficial”.
Estos esfuerzos son propios de gobiernos autoritarios que pretenden controlar y dominar la conversación en redes sociales, a través de la manipulación y contaminación de los hechos para esconder la realidad denunciada por los ciudadanos y para reforzar e imponer versiones alteradas sobre sucesos internacionales.
Para conocer más detalles sobre la investigación y las posibles soluciones a este flagelo, así como también cómo puedes ser parte de la solución, puedes leer el informe completo disponible online aquí o en sus versiones para descargar en español y en inglés.